¿Cómo meditar? 3 técnicas simples para meditar todos los días

La meditación es una práctica antigua que ha demostrado tener numerosos beneficios para la mente y el cuerpo. Si estás buscando una manera de incorporar la meditación en tu rutina diaria, aquí te presentamos tres técnicas simples que puedes empezar a practicar hoy mismo.

1. Meditación de respiración consciente 🌬️🧘

La respiración consciente es una técnica de meditación muy sencilla pero efectiva. Consiste en centrar tu atención en tu respiración, observando cada inhalación y exhalación sin intentar controlarlas. Puedes empezar con sesiones de 5 minutos e ir aumentando el tiempo gradualmente. Esta práctica te ayudará a calmar tu mente y a reducir el estrés.

Para comenzar, siéntate en una posición cómoda, cierra los ojos y lleva tu atención a tu respiración. Observa cómo el aire entra y sale de tus pulmones. Si tu mente se distrae, simplemente vuelve a centrarte en tu respiración. Con el tiempo, notarás una mayor sensación de calma y bienestar.

2. Meditación guiada 🎧🧘

La meditación guiada es ideal para quienes están comenzando. En esta técnica, una voz te guía a través del proceso de meditación, ayudándote a mantener el enfoque y a relajarte. Puedes encontrar meditaciones guiadas en aplicaciones, videos en línea o incluso en podcasts. Esta práctica es excelente para reducir la ansiedad y mejorar la concentración.

Busca un lugar tranquilo, ponte unos auriculares y sigue las instrucciones de la meditación guiada. Permítete seguir la voz y sumergirte en la experiencia. Con el tiempo, te será más fácil entrar en un estado meditativo por tu cuenta.

3. Meditación de escaneo corporal 🛌🧘

El escaneo corporal es una técnica de meditación que implica centrar tu atención en diferentes partes de tu cuerpo, desde los pies hasta la cabeza. Esta práctica te ayuda a liberar tensiones y a aumentar la conciencia corporal. Es especialmente útil para relajarte antes de dormir.

Para practicar el escaneo corporal, acuéstate en una posición cómoda y cierra los ojos. Comienza por centrar tu atención en tus pies, notando cualquier sensación que puedas tener. Luego, lentamente, ve subiendo tu atención por tu cuerpo, parte por parte, hasta llegar a la cabeza. Si encuentras alguna tensión, respira profundamente y trata de relajarte.

Referencias:

• Kabat-Zinn, J. (1990). Full Catastrophe Living. New York: Delta.
• Chopra, D. (2018). The Healing Self. New York: Harmony.